Sjögren

El síndrome de Sjögren: qué es y cómo tratarlo

El síndrome de Sjögren es una enfermedad autoinmune donde los glóbulos blancos de la sangre atacan al tejido y órganos sanos del cuerpo, entre los que se encuentra la zona de los ojos.

Se calcula que la población más afectada por este síndrome comprende a mujeres de entre los 40 y los 60 años de edad. Sin embargo, puede afectar a hombres y mujeres de cualquier edad o raza.

 

¿Cuáles son sus síntomas?

 

En lo referente a los ojos y la vista, el síndrome de Sjögren puede manifestarse a través de los siguientes síntomas:

  • Ojos muy secos
  • Visión nublada o borrosa
  • Quemazón o sensación de ardor en los ojos
  • Sensación áspera o arenosa en los ojos
  • Enorme sensibilidad a la luz
  • Incomodidad al usar lentes de contacto
  • Inflamación de los márgenes de los párpados

 

¿Cómo se diagnostica esta enfermedad?

 

El oftalmólogo puede prescribirle una serie de pruebas para corroborar que usted padece esta enfermedad. Una de ellas se conoce como la prueba de Schirmer. En su realización, se necesita de la colocación de una pequeña tirita de papel bajo el párpado inferior con el fin de efectuar una medición exacta de la cantidad de lágrimas que el ojo produce en un tiempo determinado, que normalmente suele ser de aproximadamente unos cinco minutos.

Además, su oftalmólogo examinará las pequeñas glándulas de sus párpados, conocidas como glándulas de Melbomio, que son las responsables de producir una serie de fluidos o aceites que evitan que las lágrimas se sequen demasiado rápido. Si estas glándulas están inflamadas o sufren alguna obstrucción, es posible que sus lágrimas no tengan la cantidad o la calidad necesaria de aceite. Esta es una de las causas que provoca el ojo seco.

No obstante, se pueden realizar otros tipos de pruebas no relacionadas con la vista para confirmar la presencia del síndrome de Sjögren. Por ejemplo, se puede medir la cantidad de saliva que tiene en su boca. También puede realizarse exámenes de sangre para comprobar la presencia de ciertas proteínas conocidas como anticuerpos y otros marcadores sanguíneos que generalmente se encuentran en personas que padecen esta enfermedad.

Asimismo, si fuese necesario, su oftalmólogo puede remitirlo a un reumatólogo, un médico especializado en enfermedades autoinmunes, que puede revisar los exámenes de sangre realizados y ayudar con el tratamiento.

 

¿Cómo tratar el ojo seco producido por el síndrome de Sjögren?

 

Tratar el ojo seco permanente a causa del síndrome de Sjögren es fundamental, ya que, de no hacerlo, sus ojos estarán siempre irritados y con una sensación muy incómoda. Además, en algunos casos pueden llegar a infectarse o hasta incluso desarrollar cicatrices que afectarían gravemente a su visión.

Algunos profesionales pueden recomendarle utilizar gotas o lubricantes especializados, ya que estas sustancias pueden evitar que sus lágrimas se sequen demasiado rápido y sus ojos permanecerán húmedos durante un mayor periodo de tiempo.

Asimismo, se debe señalar que existen otros medicamentos en forma de gotas oftálmicas que su médico puede prescribir en algunos casos. Los medicamentos para los trastornos autoinmunes también pueden ser prescritos para ayudar a mejorar el resecamiento.

Si tiene problema con las glándulas de Meibomio (lo que se conoce como disfunción de las glándulas de Meibomio o DGM), es posible que su médico decida tratar esto también. De esta forma, su función lagrimal se mantendrá normal.

Para ayudar a mantener húmedos sus ojos, se recomienda:

  • Beber agua abundantemente
  • Utilizar lágrimas artificiales y lubricantes oculares con la frecuencia que su oftalmólogo recomiende
  • Usar un humidificador en su hogar si el aire es demasiado seco
  • Informar a su oftalmólogo acerca de cualquier medicamento que esté tomando (incluyendo medicamentos para la alergia), ya que algunos de ellos pueden causar resecamiento ocular

 

Si tienes alguna pregunta no dudes en ponerte en contacto con nosotras. Recuerde que en Visión Lorca estamos para ayudarte.